Bélgica se excusa por deportación de judíos en II Guerra Mundial

Bruselas. El primer ministro belga, Elio Di Rupo, se excusó hoy por la responsabilidad de su país en la deportación de judíos durante la II Guerra Mundial.

  Con motivo de la celebración del aniversario 70 en esta nación del llamado Shoah, término hebreo utilizado para referirse a la aniquilación de judíos en Europa por la entonces Alemania nazi, el gobernante calificó el hecho como "uno de los episodios más oscuros" de la historia nacional.

Di Rupo se sumó a las disculpas presentadas por algunos de sus predecesores en el cargo por la expatriación de más de 25 mil judíos y gitanos hacia el campo de exterminio de Auschwitz (Polonia), entre 1942 y 1944, acción ejecutada con ayuda de ciudadanos belgas y de autoridades del país.

Durante el memorial celebrado este domingo en los cuarteles de Dossin, en la localidad de Malinas (norte de Bélgica), de donde partían las víctimas con destino a Auschwitz, el primer ministro criticó que en esa ocasión el Estado belga "adoptó una actitud demasiado dócil e indigna de una democracia".

Al comentar sobre las conclusiones de una investigación del Centro belga de Estudios y Documentación sobre Guerra y Sociedades contemporáneas, Di Rupo precisó que "no es excusa" el hecho de que el Gobierno nacional abandonara Bélgica para reunirse en Londres con los aliados.

Asimismo, Di Rupo destacó el papel de la resistencia belga, que ocultó a judíos o boicotearon acciones de los ocupantes.

Por último, invitó a la cámara alta belga a debatir con premura una resolución para reconocer oficialmente la responsabilidad del Estado en la deportación de judíos.


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